Grabatron, la invasión a la tierra nunca tuvo tanto gancho

Las invasiones alienígenas han sido, y siguen siendo, un tema recurrente en la cultura audiovisual occidental. A través de muchas manifestaciones hemos visto cómo los humanos han defendido la tierra de una amenaza exterior o bien éstos, los extraterrestres, han logrado arrasar con todo en el planeta azul.

Los videojuegos no son una excepción, empezando por el primigenio Space Invaders, y ahora los chicos de Future Games of London nos retan a tomar los mandos de una nave alienígena y que destrocemos todo lo que se ponga a nuestro alcance. Dicho así Grabatron parece un juego más pero su propuesta es bastante interesante.

El nombre ya nos da alguna pista de lo que nos vamos a encontrar. Grab, del inglés agarrar, es la mecánica principal que utiliza el juego. Utilizando una garra extensible tendremos que enganchar personajes y objetos para o bien destruir el escenario o abducir personas o animales.

Antes de ponernos a jugar tendremos que calibrar el acelerómetro. A través de este sensor desplazaremos nuestra nave y pulsando sobre la pantalla soltaremos nuestra garra. El control responde bastante bien y en cualquier momento podemos cambiar la sensibilidad del movimiento. Además, podemos optar por utilizar un control táctil algo más cómodo pero no muy práctico. Al principio la sensación es algo confusa pero pasados unos minutos se coge rápido el ritmo.

Las partidas en Grabatron no están sujetas a ningún límite de tiempo. El juego nos invita a que exploremos el escenario, que vayamos a nuestro ritmo. Eventualmente, irán apareciendo misiones que podemos aceptar, en forma de objetivos iluminados, e intentar cumplir. A saber: destruir un número determinado de construcciones, abducir a ocho vacas…

Según vamos cumpliendo objetivos y aumentando nuestra puntuación nuestra nave irá obteniendo más saludo. Si queremos mejorarla tendremos que pasar por caja y comprar las actualizaciones en el Android Market. No son fundamentales, eso sí, para disfrutar de Grabatron.

El escenario por el que nos vemos es muy extenso y los parajes que van apareciendo son muy variados. Siempre con el mínimo común de una estética que recuerda al sur de los Estados Unidos, graneros, ganado, cafeterías en el desierto, bases militares estilo Area 51… Visualmente, como podéis ver en las capturas de pantalla y en el vídeo, el juego está muy bien elaborado.

En resumen, un juego divertido e ideal para los ratos muertos. El sistema de físicas está muy bien implementando y a la que nos hagamos con el control disfrutaremos destrozando todo lo que se ponga a nuestro paso. El juego está rebajado a 0,77 euros aunque dispone de una versión gratuita para quienes quieran probarlo.