Si por algo son conocidos todos los smartphones de HTC es por el refinado diseño y la gran construcción que caracteriza al fabricante taiwanés, que ha tenido siempre buen gusto a la hora de elegir materiales para sus dispositivos.
Sin embargo, la mala racha que la firma arrastra desde hace varios ejercicios continúa pasando factura al otrora rey indiscutible del mercado smartphone, que según The Wall Street Journal podría estar pensando fórmulas para abaratar costes en la producción de algunos de sus nuevos terminales, sobre todo en las gamas media y baja.
No es algo sorprendente, pues muchos fabricantes optan por la externalización para lanzar remarcados los dispositivos que les fabrican otras empresas, e incluso podríamos verlo como una medida acertada para focalizar esfuerzos y recursos en la gama alta, la que sube el pedigree, mientras las gamas de entrada y media buscan reducir costes lo máximo posible para llegar a más compradores potenciales.
En concreto, parece que HTC ha encargado tres dispositivos de la gama Desire a Compal Electronics Inc. y a Wingtech Group, dos empresas afincadas en Taiwán y China respectivamente, que comenzarían fabricando masivamente el nuevo HTC Desire 616, un dispositivo con el conocido chipset con procesador de ocho núcleos de MediaTek que se filtró hace unas semanas.
Veremos si la nueva estrategia de HTC reporta sus frutos en los próximos trimestres, al menos a nivel económico, aunque siempre será positivo que la firma taiwanesa continúe tomando decisiones para encauzar un rumbo que parecía completamente perdido.
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